Palabras de bienvenida del Visitador y de la Visitadora

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Despues unas palabras de bienvenida del Visitador (P. Juan de la Rosa) y la Presidenta de JMV en Espana (Maria Molina), la Visitadora (Sor Eugenia Gonzalez) dirigio estas palabras a los delegados:


EVANGELIZADOS PARA EVANGELIZAR

Habéis elegido un lema con dos formas no personales de un verbo: participio e infinitivo. ¡Qué expresiva y sugerente puede ser la gramática!

Un participio que actuando como adjetivo, expresa una cualidad: EVANGELIZADOS. Un infinitivo que expresa una acción: EVANGELIZAR.

En un mundo que prefiere adjetivos superficiales que buscan la apariencia y el bienestar, habéis apostado por el adjetivo que aporta la verdadera felicidad. En un mundo atraído por acciones que buscan la comodidad y la diversión, habéis apostado por la acción que puede transformar la sociedad.

Enhorabuena, jóvenes, habéis sabido buscar en el diccionario el verbo más apasionante, el que entraña más riesgo, el verbo por el que vale la pena entregar la vida. “El Verbo se hizo carne”, dice el Evangelio de Juan. Ojalá que este “verbo” con minúscula que habéis elegido también se haga carne en vosotros, y así el “Verbo” con mayúscula, habitará en vuestros corazones.

Y es que EVANGELIZADO es aquel que lee y ama el Evangelio, aquel que ha fijado su mirada en el rostro de Jesús, ha sintonizado con Él y ha asumido su estilo de vida. Porque poniendo el Evangelio en el corazón y en el centro de nuestras comunidades aprendemos a vivir como Jesús.

Vosotros, miembros de Juventudes Marianas Vicencianas, estáis llamados a acoger el Evangelio desde vuestra identidad: como JÓVENES, como MARÍA, como SAN VICENTE.


  • EVANGELIZADOS COMO EL JOVEN DEL EVANGELIO : Cuando salía Jesús al camino, se le acercó un joven corriendo, se arrodilló y le preguntó: Maestro bueno, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna? Jesús le contestó: ¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios” (Mc 10, 17-18).
  • El joven, inquieto, busca urgentemente a Jesús, por eso se le acerca corriendo. Lo que busca en aquel maestro bueno es luz para orientar su vida personal. Jesús le recuerda que sólo Dios es bueno, en su bondad hemos de apoyar nuestra vida. De esta forma, Jesús le orienta a vivir su vida desde una lógica nueva.
  • Evangelizados como el joven del Evangelio supone salir al encuentro de Jesús, el Maestro, para encontrar el sentido de la vida.
  • EVANGELIZADOS COMO MARÍA: “… porque ninguna cosa es imposible para Dios. Dijo María: He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra” (Lc 1, 37-38).
  • María hizo posible que Dios se hiciera visible. Su absoluta disponibilidad fue la clave. Se dejó atravesar por la fuerza del Espíritu sin oponer resistencia. Dijo “esclava” porque sabía que desde ese momento dejaba de pertenecerse. Dijo “hágase” porque aquello que ocurrió en su seno sólo podía entenderse como una nueva creación.
  • Evangelizados como María supone acoger la Palabra para encarnarla, para hacer a Dios visible.
  • EVANGELIZADOS COMO SAN VICENTE: “Estando Jesús enfrente del cepillo del templo observaba a la gente que iba echando dinero; muchos ricos echaban en cantidad; se acercó una viuda pobre y echó dos reales. Llamando a sus discípulos les dijo: Os aseguro que esa pobre viuda ha echado en el cepillo más que nadie. Porque los demás han echado de lo que les sobra, pero esta, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir” (Mc 12, 41-44).
  • La escena es conmovedora. Cuando estamos instalados en el cómodo mundo del bienestar, se nos olvida lo que es la compasión, no sentimos el sufrimiento de los otros. De esta mujer se puede aprender algo maravilloso: una confianza total en Dios y una generosidad sin límites. No anda buscando honores ni prestigio alguno, actúa de manera callada y humilde. Si sabe dar todo lo que tiene es porque pasa necesidad y puede comprender las necesidades de otros.
  • Evangelizados como San Vicente supone estar dispuestos a aprender de los pobres.

La segunda parte del lema es una invitación a evangelizar. EVANGELIZAR es anunciar el Evangelio reproduciendo hoy el estilo de vida de Jesús, un estilo de vida desafiante y provocativo, es vivir identificados con su proyecto, estar siempre en camino con la confianza puesta totalmente en Dios, nunca instalados, sin poder, sin seguridad, sin prestigio social, liberados de ataduras, identificados con los últimos, curando a los que sufren, buscando para todos la paz.

Vosotros miembros de Juventudes Marianas Vicencianas estáis llamados a evangelizar desde vuestra identidad: al estilo joven, al estilo de María, al estilo de San Vicente.

  • EVANGELIZAR AL ESTILO JOVEN: “Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará?... Vosotros sois la luz del mundo… Brille así vuestra luz delante de los hombres para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mt 5, 13-16).
  • La sal conserva y da sabor, la luz ilumina y da claridad. Dar sabor y claridad es dar alegría y sentido a la vida. Producir estos efectos queridos por Jesús desde la identidad evangélica es tarea de una Iglesia joven y apasionada que quiere transformar el mundo dando esperanza y disipando tinieblas. Para ello no hay que esconderse, tampoco hay que actuar para ser vistos.
  • Evangelizar al estilo joven significa sembrar alegría y esperanza, testimoniar la novedad revolucionaria de Jesús.
  • EVANGELIZAR AL ESTILO DE MARÍA: “Su madre dijo a los sirvientes: Haced lo que él os diga… Así en Caná de Galilea Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria y creció la fe de sus discípulos en él” (Jn 2, 5.11).
  • “Haced lo que él os diga” son las últimas palabras de María que los Evangelios nos transmiten. Y tienen todo el valor de un testamento. María está convencida de que para evangelizar no bastan las palabras, son necesarios los signos y gestos, signos cercanos y amistosos. Evangelizar no es sólo hablar, predicar o enseñar. Es necesario actualizar con creatividad, los signos que Jesús hacía para introducir la alegría de Dios haciendo más dichosa la vida.
  • Evangelizar al estilo de María significa confiar en Jesús, mostrarle con el ejemplo de vida, con libertad y sin miedo.
  • EVANGELIZAR AL ESTILO DE SAN VICENTE: “Tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, era forastero y me acogisteis, estaba desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitasteis, en la cárcel y vinisteis a verme…” (Mt 25, 35-36).
  • La caridad es el lenguaje de la nueva evangelización que más que con palabras se expresa por obras de justicia, de paz, de fraternidad, de cercanía y de ayuda a las personas con necesidades espirituales y materiales, porque a Jesucristo, que nos ama, le interesa todo el hombre.
  • Evangelizar al estilo de San Vicente significa mirar el rostro de los que sufren con compasión y servirles con amor.

Iluminados por el verbo EVANGELIZAR, tenéis que conjugar otros verbos: elegir, estudiar, reflexionar, discernir, fortalecer, convivir… Por eso:

BIENVENIDOS jóvenes, asesores y acompañantes, evangelizados para evangelizar al estilo joven porque durante estos días sabréis crear un clima de disponibilidad, alegría y esperanza en la convivencia diaria, en las elecciones de vuestros responsables.

BIENVENIDOS jóvenes, asesores y acompañantes, evangelizados para evangelizar al estilo de María porque la escucha atenta de la Palabra de Dios dará luz a vuestras celebraciones, reflexiones y discernimientos.

BIENVENIDOS jóvenes evangelizados para evangelizar al estilo de San Vicente porque los pobres serán los primeros beneficiados de vuestros estudios, trabajos y conclusiones.

BIENVENIDOS todos a esta ciudad de Salamanca, ciudad “caritativa y hospitalaria”. Estoy segura de que la Asociación saldrá fortalecida de esta Asamblea

Termino uniéndome a las palabras que San Pable dirige a Timoteo: “Que nadie menosprecie tu juventud. Procura, en cambio, ser para los creyentes modelo en la palabra, en el comportamiento, en la caridad, en la fe, en la pureza… No descuides el carisma que hay en ti” (I Tim 4, 12.14).